1er SIMPOSIUM SOBRE LA DISCIPLINA O ARTE DE CAGAR

Cagar es el arte de traer mierda a este mundo, es casi como parir. Pero puede ser un arma de doble filo, es por eso por lo que, tras una reflexión profunda, os expongo lo que creo debería ser los pasos a tener en cuenta.

1. PREPARANDO EL TERRENO.-

Bien, ya tienes la cabeza de tortuga asomando, das pasitos ligeros a modo de pingüino y con el culo apretado y conforme vas acercándote al water, tu cuerpo, que es muy inteligente, va relajando el esfínter aunque tu no quieras y los movimientos peristálticos se hacen cada vez más fuertes.

Este momento es crítico y aconsejo no dejarse llevar por las prisas, es necesario antes de sentarse (luego puede ser una ruina) hacer un esfuerzo y echar una visual al papel existente que rodea la zona de evacuación.

Normalmente en casa, caso de haberte precipitado en la descarga, puedes pedírselo a alguien o bien, suele haber repuesto en algún mueble cercano y la posibilidad de caer chocolate al suelo es ínfima. Pero ¿que pasa si lo haces fuera de casa, pongamos en un bar de mala muerte en la feria de Mazagón?, en estos casos un error de esta índole puede marcarte para toda la vida. Incluso los pósteres plastificados (mala elección) o los calcetines blancos que algún amigo pueda acercarte no serán suficiente.

No menos importante es asegurarse la intimidad del acto, aconsejo por tanto antes de empezar que os aseguréis de que el lugar cuenta con las medidas de intimidad pertinentes a modo de paredes y puerta. Y aunque no os lo creáis con el apretón y la ofuscación del momento os puede pasar, así por ejemplo, en una famosa discoteca de Punta Umbría, se dio uno de estos casos, en el que el sujeto una vez desalojado el/los muñeco/s percibió la ausencia de puerta. Al menos contaba con papel, pero aún así se plantea un dilema sin final feliz, ¿qué matrícula enseño?, es decir, ¿me limpio de cara a la gente que está meando y aunque me reconozcan no me ven el hueco o me doy la vuelta ocultando mi identidad y les enseño las entrañas?... que no te toque.

Para los más lentos es bueno asegurarse algo de lectura o tener a mano un móvil con juegos.

Entonces repasemos. Antes de empezar, observar: material de limpieza y carpintería.

2. COLOCACIÓN.-

Ya estamos en el trono, en la sillita de la reina, en el cagadero o como prefieran llamarlo. Esta fase te puede ahorrar un dinerillo en papel a fin de mes, así que atentos.

Es deseable, a fin de evitar roces innecesarios entre tus cachetes y el truño, que apoyes un cachete en la taza forzándolo hacia el exterior y con el otro hacer lo propio hacia el otro lado. El grado de apertura depende de cada persona y de sus hábitos sexuales, en los cuales no entraré (al menos hoy). Un indicativo de que estás forzando demasiado sería no dejar huella en el papel o dejar rastro sanguíneo. A partir de aquí ya es vicio de cada uno.

También es importante alinear tu ojete con el centro geométrico de la superficie de agua.

Con un grado de apertura adecuado la fase “Operativa” se hace más rápida, fácil y económica. Luego la veremos.

Ya con el pasajero colgando pasamos a la siguiente fase.

3. DESCARGA.-

Esta fase es muy personal, y en función de la velocidad de bajada, naturaleza de la compota, antecedentes comestibles, etc. se dan varios tipos:

Cagada lavativa: suele ocurrir tras un día de juerga, se reconoce por un color ennegrecido (depende del tipo de alcohol) y un olor insoportable. La textura tipo batido de lentejas, baja a gran presión y con un caudal muy a tener en cuenta que termina arrastrando toda la flora intestinal. También es conocida como cagada sifón.
Las consecuencias de este tipo son obvias, pues difícilmente cualquier parte del water y tu cuerpo quedará exenta de metralla. Incluso si disponéis de dos espejos, aconsejo que os miréis el culo y espalda, aunque para salir de dudas es deseable directamente meterse en la ducha.

Cagada babosa: De consistencia media, tiene la suficiente para bajar por las paredes pero va perdiendo materia a medida que lo hace. Deja, pues, frenazos importantes que han de ser retirados con un palo que hay al lado del wáter. Muestro foto para que reconozcáis el utensilio.

En este caso aparece atado a una cadena, pues al parecer es un objeto de gran valor.

Cagada Crocanty: Viene siendo un mojón con trozos de crispys no digeridos, y que a su paso te araña las paredes, provocando pequeñas punzadas como si de una almorrana se tratase.

Cagada Drácula: sale con sangre debido al gran esfuerzo realizado. Esta sangre no siempre es achacable a la boñiga (haced ejercicio de conciencia).

Cagada espía: esta una vez pulsado el botón de desalojo, ves como desaparece y al momento vuelve a salir. Este fenómeno es debido a la densidad del detrito, más baja que la del agua. Normalmente necesita de 3 pulsaciones para que su interior se empape en agua y pese más, y por fin se vaya al paraíso de las mierdas (que para los creyentes debe existir).

Cagada estalactita: Sale a modo de churro, y por más que uno intenta fruncir el esfínter es incapaz de seccionarla. Aquí entra en juego el movimiento de caderas.

Cagada perfecta: Puede pasar si sigues mis consejos. El marrón desaparece sin pulsar el botón, te limpias y no manchas el papel, y este queda listo para sonarse la nariz.

Cagada Hulk: Es aquella en la que se convierte en un esfuerzo desmesurado que infla las venas de tu cuello y toda la sangre sube a tu cabeza. Apretando puños y dientes, terminas exhausto y verde del esfuerzo. Da la impresión que viene de lado. Es característico además un dolor intenso en el bujerete.

Cagada Iceberg: De tales proporciones épicas, que una vez ocupado el fondo del wáter, asoma un buen trozo por encima del nivel del agua. Suele necesitar ayuda para su desalojo.

Cuasicagada: Otra vez será.

Cagada de concurso: Grande, muy grande, de textura fina y sin oquedades, terminaciones redondeadas perfectas. Un buen ejemplar. Esperas hasta el último momento para tirar el papel porque te da pena no compartirlo con nadie.

Cagada lateral: Es todo un arte, pocas personas la practican, pues el riesgo de que el mojonazo te resbale por el cachete es muy alto. En caso de que el ejemplar sea muy grande, se corre el riesgo de que pinche en el suelo y no termine de salirte. Suele darse en la playa tras una cogorza. Por la creatividad del ejercicio y la situación general suele dar lástima y normalmente alguien se te acerca con pañuelos a sanearte el boquete.


4. OPERATIVA DE SANEAMIENTO.-

Ya hemos parido al negro y el primer restregón es vital, es la que más carga de producto va a contener, es por esto muy importante que se coja papel abundante. Todos los estudios parecen coincidir, que la densidad óptima de papel se alcanza tras 4 dobleces, esto crea una tensión superficial en el papel suficiente para aguantar la acometida. Insisto en este punto, pues un paso en falso puede acabar con tu dedo manchado de turrón calentito.
La siguiente pasada es también muy importante, ya que ahora el sujeto se encuentra expuesto al aire, y es necesario doblar tres veces para embolsar con seguridad el truño y salvar así tus dedos. A partir de aquí la cantidad retirada del ojete disminuye bastante, por lo que se puede empezar a doblar una sola vez.

Llegado a este punto quiero advertir de otro fenómeno peligroso, y es que, se puede dar el caso, debido a la longitud del papel y la fuerza centrípeta generada para acercarse el papel, en que este acabe dentro del wáter y se moje. Tú estas entregado a tu trabajo y no te das cuenta, pero al ir consumiendo papel llega un momento en que te salpicas del “metunje” generado.
Igualmente si el papel es muy largo irá limpiando el suelo, recogiendo los gérmenes que luego acabarán haciendo una fiesta anal.

Se ha demostrado empíricamente que la longitud óptima del papel del culo está alrededor de 60 cm*.
(*Teniendo en cuenta una altura estándar de wáter de 40 cm y suponiendo la tira de papel ya preparada para la primera acometida, es decir parcialmente enrollado.)

Existen diferentes movimientos de limpieza anal, yo particularmente prefiero en las dos primeras acometidas empezar por la parte baja y con un sutil movimiento ascendente retirar marrón por rozamiento, a partir de la tercera, opto por dejar la mano quieta y que el papel trabaje por presión e impregnación.

Quiero recalcar que el movimiento ascendente deber ser sutil, casi imperceptible al ojo humano (esta vez me refiero a los dos de arriba), se han dado casos de irritaciones graves en la nuca.

No he hablado aún de la forma de llegar al recto, yo pensaba que la forma natural de acceder a él era rodeando tu nalga por detrás, pero, aunque no lo he visto, se de una persona que asegura que es más cómodo llegar por el interior. A mi personalmente me parece un riesgo innecesario, pues si te pasas un poco acabas con el “frontón de Anoeta” manchado.

5. EVACUACIÓN Y ACONDICIONAMIENTO DEL LUGAR.-

Bueno, ya sólo nos queda pulsar una, dos o tres veces (según el caso) el botón del wáter, para zanjar el tema.

Se puede presentar el problema de un corte de agua, y que la mochila haya sido ya descargada por uno más rápido que tú, o bien el sistema del wáter se haya estropeado. Estos casos suelen estar señalizados con una nota informativa que, por supuesto, no te has dado cuenta hasta este momento.
Puedes, si es el caso, coger un cubo y tirar agua, pero si te encuentras fuera de casa, hay que contar con el material apropiado y una conciencia a prueba de bombas. Estas condiciones no se van a dar, así que dejas el regalo allí, encima del que ya había antes, sales silbando y pensando a este bar no vengo más.

Si por el contrario se da este caso y la conciencia no te deja tranquilo, y pongamos que estás en la casa de unos amigos de tus padres, utiliza cualquier método, pero nunca, repito nunca, te guardes el zurullo envuelto en papel dentro del bolsillo de la chaqueta.

Por último es menester, si estás en casa, instalar un dosificador automático de colonia para disimular tu rastro.

TRUCOS

Para los más escrupulosos os voy a ilustrar un método sencillo y limpio para cagar fuera de casa.

Imprescindible hacernos con un ejemplar de un periódico gratuito como el de la foto, aunque es por simple ahorro. Si vais a coger uno de pago, que no sea el ABC, más que nada por problemas de formato.

Recortad el periódico como en la foto, se hace simplemente con la mano, y difícilmente os saldrá peor que este.

Abrid el periódico y colocarlo de esta manera. Listo para las posaderas.

El método está bien, aunque no evita otro problema que tenemos sólo los hombres, y es el roce sucio y frío entre porcelana y órgano reproductor masculino, también llamado cipote. Por esto os aconsejo reservéis un trozo del periódico para esta zona.

Como sé que me lo vais a preguntar, me voy a adelantar: este método no es compatible si el roce no es con la porcelana si no con el agua. En tal caso, enhorabuena.

Hala bloggers hasta el próximo Simposium.